Lo más fascinante era hacer titulares, te quedabas horas, pensando textos con sentido para las diferentes marcas. Recuerdo a mi primer Director Creativo de la agencia AKME, Cesar Perea, quien me mandaba a leer a Claude Hopkings, Joaquín Laurente, David Ogilvy entre otros grandes publicitarios. Luego en la agencia PROPERÚ había un libro llamado "La guerra de las marcas" muy bueno para analizar a la competencia. Recuerdo que era fascinante que tu jefe te mande a leer y que vivas de los conocimientos de los grandes profesionales que te antecedieron. Los libros eran sinónimo de crecer profesionalmente y aspirar a ser cada día mejor.
Pero últimamente, he notado que la tecnología y la velocidad de la información, y sobre todo las nuevas tendencias han llevado a las empresas a estereotipar la figura del Community Managers como el que soluciona todo en tiempo real y saca contenidos al momento, aunque estos muchas veces tengan poca calidad en el texto y salgan como "hamburguesas". Esta tendencia está creando profesionales de la Redacción Publicitaria con poca capacidad de análisis y lectura a profundidad.
Me doy cuenta que si de alguna manera la tecnología y las redes sociales están haciendo la vida más sencilla gracias a estos especialistas, está creando robots que no se dan un tiempo para leer un libro ni conocer la historia de su carrera. El otro día preguntándole a un aspirante a redactor creativo porqué no deseaba leer un libro que le recomendé me dijo "pero es que es mucho texto, deme algo más sencillo". Esto me dejó pensando y quise escribir este artículo.

Por ello me doy un tiempo para dar algunas recomendaciones para los futuros redactores publicitarios que quieran tomar este camino como parte de su vida:
1) Si quieres crecer, los libros debes leer: es básico más que por la lectura en sí, por su capacidad de análisis y retención de imágenes en la lectura.
2) Tu jefe sabe más que tú, hazle caso que por algo te lo dice: a veces uno piensa que todo lo encontrará en las redes sociales pero se olvida que la experiencia es muy importante en el desarrollo profesional.
3) No creas que porque haces más post eres mejor redactor creativo: toma tu carrera como un camino para seguir creciendo. Los post son parte pero no son todo, siguen buscando, quizás en el camino te darás cuenta que ser un redactor publicitario implica también semiótica y tener un diccionario a la mano.
4) Sé feliz frente a los retos: ahora todo se consigue por google, pero date el tiempo por un instante de redactar textos por tu propia inspiración.
Estoy convencido que un buen libro para un redactor publicitario, es la solución para que mejoren las campañas nacionales.
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MBA Joan Manuel Flórez Estrada
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