Cuando practicaba en la agencia de publicidad PROPERÚ conocí a una ex monja llamada Paula que era secretaria de el sr Villacorta. Ella ya tenía su vida hecha y un chico que se moría por ella. Como era mucho mayor que yo me daba consejos cada vez que yo subia llevando algún encargo de mi jefa. Veía un adolescente que quería lograr muchas cosas. Una vez me dijo: "Joan, a Dios el que le pide poco es un loco". Esas palabras después de 20 años siguen rondando mi mente. Y sigo creyendo que los limites que uno se pone son mentales. Que lo que quieras lo puedes lograr. Absolutamente todo. Y que no hay que presionar a nadie solo pedir. Lo que es es. Lo que no no. Solo hay un requisito: que seas integro, una persona ética y que con tus logros no dañes a nadie en el camino. Hoy le mando un gran saludo a mi amiga Paula donde esté. Y me sigo alegrando de lo nuevos logros que van apareciendo en el camino
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